Un cuadro de clasificación
de los 17 grupos atendiendo a sus simetrías, según el orden de
rotación y número de espejos,
puede verse aquí. Esta clasificación también sirve como sistema de
reconocimiento del grupo.
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El azulejo tiene forma de
romboide. Al variar la posición del vértice, puede tomar como casos
particulares forma de cuadrado, de rombo o de rectángulo (podría
también tomar forma de diamante si el punto verde tuviese más
libertad).
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Las simetrías no dependen
del motivo decorativo (a no ser que este disponga de ellas) así que si cambiamos el dibujo del cisne por otro motivo
cualquiera, que no tenga simetría, no podrán aparecer más o menos
simetrías que las que aparecen con el cisne.
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Al juntarse todos los
bordes unos con otros se forman dos haces de rectas paralelas (que
establecen la trama del mosaico).
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Al activar la casilla
"Aplicar simetrías" no sucede nada porque en el azulejo no se ha
realizado ninguna simetría del motivo
decorativo.
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Los vectores indican las
direcciones y sentidos de traslación. Su longitud indica el paso
mínimo. Cada vector es paralelo y de longitud igual al lado del
azulejo.
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Al activar la casilla
"Centros de rotación" no sucede nada porque el motivo decorativo no ha
sido rotado.
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Al activar la casilla
"Ejes de reflexión" no sucede nada porque el motivo decorativo no ha
sido reflejado.
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Para que vuelva a
coincidir con el original, la copia debe desplazarse como mínimo un
azulejo. La isometría que corresponde
a esta simetría por desplazamiento se llama traslación.
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Al rotarla 90º la copia
no coincide con el original porque el mosaico no tiene simetría de
rotación.
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Al rotarla 180º la copia
no coincide con el original porque el mosaico no tiene simetría de
rotación.
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Al rotarla 360º la copia
coincide con el original porque una rotación de 360º equivale a una de
0º, es decir, equivale a mantener el original sin realizar ninguna
acción (dicho de otra forma, el orden de rotación de todos los
mosaicos es mayor o igual que 1).
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El segmento violeta
representa el eje de simetría de la reflexión horizontal. La copia no
coincide con el original porque el mosaico no tiene simetría por
reflexión.
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Al reflejarla
horizontalmente, las esquinas de
la copia (paralelogramo azul) no coinciden con las esquinas originales
porque el romboide no es simétrico respecto al eje horizontal (a no
ser que le demos el aspecto particular de un rectángulo).
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Si efectuamos dos
traslaciones seguidas de la copia obtenemos una traslación. La composición de dos traslaciones siempre
es una traslación (o la identidad, es decir, equivale a no realizar
ninguna acción).
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El grupo o tiene como
isometrías las traslaciones determinadas por los lados del azulejo.
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Los mejores diseños libres
suelen ser los que sacan partido de las simetrías, acentuando el
movimiento de traslación y los efectos de centros de rotación y
espejos cuando los haya.
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Antes de usar el color
manual es recomendable realizar diversos y dispares diseños combinando
el color automático con la activación y desactivación de la casilla
Rastro.